A las 11:29 de la mañana en Egipto (4:29 a.m. hora colombiana), sitios web como la Embajada de Estados Unidos en El Cairo, el Banco Comercial Internacional de Egipto y la Bolsa de Egipto volvieron a estar en línea, y esta fue la señal que confirmó la inesperada reconexión del servicio por parte de los mayores operadores de Internet del país.
El blog de la firma de inteligencia de Internet Renesys reportó que todos los operadores estaban normalizando sus conexiones, con excepción de Noor, el ISP exclusivo de empresarios y miembros del gobierno, que había suspendido su servicio un día después de los demás operadores y que lo recolectó hora y media después.
La reconexión no se debe a un parte de rebeldía de los operadores de Internet contra el gobierno de Mubarak, que las obligó a ‘cortar sus cables’ el pasado 27 de enero en lo que se considera el mayor acto de censura de Internet en sus 3 décadas de historia, sino en la autorización que dio el propio presidente, en una decisión que podría calificarse como una señal de buenas intenciones del presidente, pero que llega en momentos en los que los manifestantes no se conforman con otra cosa que su salida del poder.
La Red fue una de las herramientas fundamentales de los opositores para organizarse en todo el país y manejar la logística de marchas y protestas para lograr un cambio político. Por ello, el gobierno de Hosni Mubarak, que en 30 años no había enfrentado una crisis como esta, primero intentó bloquear las redes sociales, luego las conexiones a Internet vía celular, y ante los pocos resultados de esta medida, decidió cortar toda Internet.
Aunque algunos activistas virtuales –ciberactivistas– lograron conectarse a Internet por estos días mediante conexiones vía telefónica con llamadas internacionales, y Google y Twitter sorprendieron al unirse con el fin de permitir a los egipcios expresarse en la red de microblogging con un servicio que permite dejar mensajes de voz vía telefónica y que los convierte en tweets, el pueblo seguía desconectado y afrontando las consecuencias de la incomunicación.
En estos momentos ya se pueden ver tweets con el hashtag #Egypt enviados directamente desde El Cairo y el resto del país.
Internet había muerto en Egipto y al quinto día resucitó. ¿Será una premonición de lo que podría ocurrir con la democracia?